Beneficios de contratar empleados “perezosos” según Bill Gates
Bill Gates, cofundador de Microsoft y filántropo estadounidense y unas de las personas más ricas del mundo, asegura que contratar a empleados con poca iniciativa es beneficioso para las empresas.
Para muchos, esta afirmación puede resultar extraña. Se suele creer que un empleado perezoso no sería bueno en el trabajo y podría dificultar el crecimiento de la compañía, pero Gates tiene una perspectiva diferente.
No es común escuchar esto, especialmente viniendo de alguien como Bill Gates, quien es la mente detrás de una de las empresas de tecnología más importantes del mundo. Durante una conversación con la prensa internacional, Gates declaró: “Siempre pondré a una persona perezosa a hacer un trabajo difícil porque encontrarán una manera fácil de hacerlo”.
Esta forma de pensar puede resultar sorprendente para muchos, pero Gates explica que esta técnica se aplica dentro de Microsoft. Según él, las personas perezosas suelen encontrar enfoques creativos para resolver problemas y situaciones que surgen en la compañía.
Experiencia personal de Gates
Gates profundizó esta idea compartiendo una experiencia personal como estudiante. Durante muchos años, él mismo fue un alumno perezoso y se aburría haciendo tareas sencillas que le pedían en clase. Sin embargo, su profesor de octavo grado logró descubrir su potencial en matemáticas y lo alentó a destacarse.
A partir de esta experiencia, Gates comprendió que, en algunos casos, la mejor manera de resolver problemas es aprovechando la creatividad de las personas que tienen menos aversión al trabajo, ya que pueden ofrecer soluciones rápidas y sencillas para avanzar en el desarrollo de un proyecto.
Para Gates, optar por el camino más fácil no significa ser perezoso, sino todo lo contrario. Esta forma de trabajar permite una mayor eficiencia y una perspectiva diferente para abordar los problemas que se presenten.
Además, Gates cuestiona el modelo laboral actual, en el que se pone énfasis en cumplir muchas horas de trabajo que no garantizan la materialización de objetivos. Según él, se trabaja bajo estrés y no se logra un desempeño óptimo en las tareas asignadas.
“La cultura laboral en general tiene este problema: la percepción de que el número de cosas que haces es más importante que la productividad real”, dijo Gates en una conferencia.