El Independiente de Tévez llegaba primero e invicto y tenía su parada más difícil: el monumental. Y esta cancha, que se le hace muy difícil al rojo (y a todos los equipos del fútbol argentino) fue el Waterloo de esta buena racha que acarreaba Tévez. River ya acumula 20 victorias consecutivas en condición de local.
En el reencuentro del “jugador del pueblo” con el público millonario, el técnico planteó un partido, según sus palabras, “de igual a igual” como prueba para este equipo que se encuentra en un buen andar.
La primera media hora sería dentro de todo de tenencia repartida. Algunas cuestiones psicológicas, en lo que respecta a ir a una estadio tan difícil, se vinculan con situaciones como la simulación en el área de Canelo, disponiendo de una posible jugada de gol. A la contra de aquel suceso Borja dispararía un tiro en el palo que por milímetros no terminó en gol.
Y de otro palo a los pocos minutos, Borja se encontraría con la pelota de rebote y tendría que sólo empujarla para adelantar a River en el marcador. Ya River sobre el final del primer tiempo comenzaba a marcar su superioridad.
El delantero colombiano, ya en el segundo tiempo, aumentaba la ventaja esta vez de una excelente jugada y muy buen buscapiés de Simón para Borja que se metía entre los centrales. El equipo de Demichelis ya comenzaba a encaminar el partido.
Y la realidad es que Independiente no tuvo reacción luego de esos momentos en los que River empieza a apabullar al rival. Los últimos minutos el equipo de Avellaneda con sus últimas armas buscando el descuento sufriría muchas contras, sumado a la frescura de algunos ingresos, como los de Colidio y Solari.
Y justamente de pase del surgido en Boca para el ex-Colo Colo es que se forjaría la goleada para River. El millonario sigue marcando lo que es una histórica campaña de local y que corona su victoria número veinte ante ni más ni menos que Independiente.
Derrota para un equipo que llegaba en su mejor momento en el año y peleando la punta de la copa. Ciertamente, esta prueba a la que se refería Tévez le pone los pies en el piso a un equipo que si bien ha levantado y mucho, hasta hace poco peleaba la permanencia y era insultado por sus hinchas. El equipo de la banda roja terminó el partido al ritmo de “este es el famoso River” y de recuerdos para con el técnico ex-Boca, marcado por su paso en la final de Madrid.
Tiene la posibilidad de recuperarse en la próxima fecha ante Arsenal en el Enrique Bochini. Por otra parte, River deberá visitar al duro Gimnasia de Madelón, que desde su llegada se ha hecho muy duro de local. En esta ocasión será una prueba para River, cuya buena campaña de local últimamente se ha convertido en un espejismo con sus papeles de visitante.
Intercambio de puestos para Independiente que acaba la fecha segundo, y pierde la punta en manos de River, quien era su inmediato perseguidor.