En el día de hoy, en el edificio ubicado en Guayaquil 179 entre Senillosa y Doblas, muy cerca del Parque Rivadavia del barrio de Caballito, aparació pintada una estrella de David en la puerta de ingreso al edificio.
Debido a ello, las autoridades realizaron una investigación en el marco de la Ley Antidiscriminación ante la aparición de un cuadro antisemita en un edificio del barrio Caballito, lo cual provocó la reacción inmediata de la comunidad judía en la Argentina.
Fuentes del Ministerio de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires informaron también que se dio aviso del caso a la División Antiterrorismo.
“Esto no es una pintada, es un delito; y en Argentina ser antisemita es un delito“, el presidente de la DAIA, Jorge Knoblovits.
La pintada coincide con las que comenzaron a aparecer en distintas ciudades europeas desde el inicio del conflicto entre Israel y Hamas, cuando el pasado 7 de octubre milicianos de este grupo islamista palestino irrumpieron en territorio israelí, secuestraron a más de 230 personas y mataron a unas 1.400 en ciudades y kibutzim del sur de ese país.
Knoblovits agregó que “esto recién comienza” y señaló que “que sean capaces de pintar un edificio, donde vive un judío, como pasó en el Holocausto, lo considero de mucha gravedad”.
El presidente de la DAIA explicó que “están analizando imágenes y ya están en manos de la justicia. Así como ya están detenidos dos antisemitas que amenazaron a la comunidad judía la semana pasada, esto ya está en manos de la justicia”.
“Antisemitas hay en todas partes, son parte de la misma matriz ideológica del odio, la misma que propone Hamas con la eliminación del pueblo judío”, añadió.
“No vamos a permitir que el antisemitismo actúe”, completó.
Por su parte, el director ejecutivo del Museo del Holocausto de Buenos Aires, Jonathan Karszenbaum, se refirió a la particularidad de esta pintada y señaló que “tal vez estamos más acostumbrados a las pintadas antisemitas con esvásticas, pero la del Maguen David (estrella de David) remite al señalamiento de los judíos, especialmente a la memoria que tiene que ver con el uso de la estrella amarilla durante la Segunda Guerra Mundial”.
En este sentido, destacó que el hecho “adquiere un relieve especial” marcado por “la sensibilidad del contexto, dado que hay un contexto global de antisemitismo en el mundo”, junto con “la forma, el tamaño y el lugar” en el que se realizó la pintada.
A su vez, si bien el hecho “llama la atención” de Karszenbaum, aseguró a que hay que “entenderlo en el contexto latinoamericano”, que es “muy diferente” al de Europa o Estados Unidos.
“Parece ser un hecho más aislado y marginal, y por eso todavía no podemos evaluarlo como un elemento extraordinario en el contexto argentino y latinoamericano“, sostuvo.
Sin embargo, agregó que “las denuncias y exposiciones en contra de los judíos han crecido, por lo menos en las redes sociales en nuestro país”.