El Toyota SW4: Un SUV grande que se mantiene en el podio de los más vendidos
¿Qué lleva a que un vehículo se convierta en un referente entre sus competidores? Varias cuestiones: una fisonomía que no pase de moda, un nivel de equipamiento y tecnología actualizados, una plataforma confiable y segura y una mecánica inobjetable, por citar solo algunas. Si a todo eso sumamos tener una bien ganada fama de “indestructible”, se entiende perfectamente porque el Toyota SW4 es el SUV grande que desde hace unos 20 años se mantiene firme en el podio de los más vendidos.
A finales de noviembre último, al modelo se le realizó un restyling estético a la versión SRX (la otra que se ofrece es la tope de gama Diamond) que buscó dotarlo de más carácter y personalidad.
Características y cambios de la variante 2024
- Largo: 4,795 m
- Ancho: 1,855 m
- Alto: 1,835 m
- Distancia entre ejes: 2,745 m
- Despeje: 227 mm
- Capacidad del tanque: 80 L
- Neumáticos: 265/60 R18″
- Peso en orden de marcha: 2140/2185 kg
¿Cuáles fueron los cambios que se le hicieron a esta variante 2024? En líneas generales, vemos que abandonó los bordes redondeados para adoptar líneas más afiladas y decididas que le otorgan una cierta agresividad. En el frente aparecen nuevos paragolpes, parrilla y molduras en negro brillante que siguen las líneas de las ópticas. Lateralmente se aprecian llantas diamantadas con detalles en negro y diseño exclusivo (los neumáticos son 265/60 R18″) y los estribos plateados fueron sustituidos por otros también en negro. En la parte de atrás se reemplazó el paragolpes por uno con una moldura inferior en juego con el embellecedor de portón (ambos en negro). Hay que admitir que todos estos retoques le quedan muy bien y lo hacen lucir más moderno.
No hay cambios en el diseño interior, donde se aprecia la calidad de materiales y terminaciones a las que nos tiene acostumbrados la marca. Por tratarse de un vehículo para 7 pasajeros, el espacio en las dos hileras de asientos es amplio para que cinco adultos viajen con comodidad (las traseras son reclinables y se pueden mover longitudinalmente), mientras que las dos plazas restantes están pensadas para niños (se pliegan en el baúl, lo cual reduce bastante su capacidad). La posición de manejo es óptima y fácil de encontrar puesto que tanto la butaca (con regulación eléctrica) y la dirección se mueven en todas direcciones.
El equipamiento destacado incluye asientos delanteros ventilados (fundamental para el verano), sistema de audio JBL, climatizador bizona, cámara con sistema de visión 360°, sensores de estacionamiento delanteros y traseros, pantalla táctil de 9″ para la central multimedia (compatible con Android Auto y Apple CarPlay), tomas USB y de 12 V y salida de 220 V, etcétera.
Como varios modelos de la marca, el SW4 cuenta con el paquete de seguridad activa Toyota Safety Sense que funciona gracias a la combinación de un radar de ondas milimétricas y una cámara monocular y que permiten detectar una variedad de peligros y alertar al conductor para evitar o mitigar accidentes. Entre los elementos destacados que lo componen aparecen sistema de precolisión frontal y de alerta de cambio de carril, control de velocidad crucero adaptativo, alerta de punto ciego y alerta de tráfico trasero, a lo que suma 7 airbags, controles de estabilidad y tracción activo, asistentes de arranque y descenso en pendientes, control de balanceo de tráiler, frenos con ABS y EBD, asistente de frenado de emergencia, encendido de luces de frenado de emergencia y anclajes Isofix y más. En definitiva, es realmente muy completo.
No se le puede pedir más
En 2020 Toyota le había realizado una mejora en la mecánica tanto de este SW4 como de la Hilux. Entonces, el conocidísimo y recontra probado impulsor diésel 1GD de 4 cilindros en línea, 16 válvulas y 2.8 L de cilindrada con turbocompresor de geometría variable e intercooler, había sido estirado de 177 CV a los actuales 204 CV entre 3000 y 3400 rpm; lo mismo se le hizo al par, que pasó de 45,9 kgm a 51 kgm (500 Nm) desde 1600 hasta 2800 rpm. Este se anexa a una también muy fiable transmisión automática de 6 marchas (con levas al volante) y la tracción es 4×4 con reductora de accionamiento electrónico y desconexión automática de diferencial.
Sin dudas, estamos ante uno de los conjuntos motor-caja más fiables y rendidores del mercado. No solo porque el bloque derrocha potencia y torque para responder ante la demanda del acelerador, sino porque la transmisión está muy bien relacionada y es rápida y precisa en el pase de las marchas; por eso, en ciudad trabaja relajado y es muy ágil de reacciones y en ruta da la sensación de que siempre tiene un poco más para dar sin importar el régimen al que se mueva. A eso suma una capacidad off-road por lo que es capaz de enfrentar cualquier terreno sin problemas (en baja es un verdadero tractor) lo cual es un diferencial enorme respecto de sus competidores.
- Motor: turbodiésel
- Cilindros: 4 en línea
- Cilindrada: 2755 cc
- Válvulas: 16
- Potencia: 204 CV a 3000 rpm
- Par: 51 kgm de 1600 a 2800 rpm
- Caja: automática de 6 marchas
- Tracción: 4×4
En cuanto a las prestaciones, acelera de 0 a 100 km/h en 9,6 s, recupera de 80 a 120 km/h en 6,8 s y alcanza una velocidad máxima cercana a los 200 km/h. Por otra parte, los consumos son acordes: en el tránsito citadino demanda unos 12 L/100 km mientras que en ruta a 130 km/h unos 10 L/100 km.
Por otra parte, hay un gran trabajo en lo que refiere a las suspensiones (independiente de doble brazo adelante y de eje rígido de cuatro brazos atrás) que poseen un reglaje claramente pensado para nuestro país y por el cual se disfruta de un confort de marcha sobresaliente, incluso para los que van atrás.
Estabilidad y aplomo definen el comportamiento dinámico, donde no muestra ningún tipo de movimientos ni desplazamientos cuando se lo conduce en velocidad.