”Yo no sé cómo un ser humano es capaz de guerrear sabiendo que el resultado es la muerte de niños e inocentes”, dijo Lula. Quien suscribió a lo dicho por su par colombiano Petro.
“Ya estuve en el campo de concentración de Auschwitz y ahora lo veo calcado en Gaza. Ningún demócrata en el mundo puede aceptar que Gaza sea convertida en un campo de concentración. Los campos de concentración son prohibidos por el derecho internacional y quienes los desarrollen se transforman en criminales de lesa humanidad“, dijo Petro.
“Gaza aparece hoy tan destruida o más que el guetto de Varsovia después que como respuesta a la insurrección judía y socialista en ese campo de concentración fue destruido por la barbarie Nazi. Han muerto bombardeados 140 niños y niñas palestinas. Ellos no eran militantes de Hamas. Hamas y la derecha israelí se retroalimentan en la sangre”, se explayó el mandatario Colombiano.
“Ante nuestros ojos, las sociedades occidentales eligieron derechas en sus gobiernos asustadas por la inmigración y esas derechas terminan apoyando la extrema derecha israelí llevando al mundo a un 1933 global. La era de la barbarie, como escribí en mi libro, ha comenzado. La inmigración se convertirá en un éxodo ante la negativa europea de abordar la democracia y la paz como los ejes de su política exterior. El gobierno de Colombia apoya las resoluciones de la ONU en donde se aboga por dos estados libres: uno israelí y el otro palestino, reconoce los dos estados y solicita al estado de Israel dejar de ocupar militarmente el estado palestino”, dijo Petro.
Página 12 hace días reseñó sobre Lula: “En público, Lula no expresa su firme apoyo a Massa. Ya varios de sus ministros lo hacen, y el todopoderoso titular de Hacienda, Fernando Haddad, ha sido explícito el mencionar que Brasil ve “con preocupación” la posibilidad de que Milei salga vencedor. El motivo de esa preocupación serían las duras críticas del ultraderechista al Mercosur, que pretende liquidar, y al “comunismo” del actual gobierno brasileño.Procurados por periodistas, los ministros e interlocutores más cercanos a Lula aseguran que la posición del presidente es de “tranquilidad”, argumentando que en sus mandatos anteriores se “llevó bien” con gobiernos de derecha en la región. En la práctica, el cuadro es bien distinto. Lula directamente y parte esencial de su gobierno prestan total respaldo al candidato peronista”
“Un buen ejemplo: fueron despachados para Buenos Aires tres de los publicistas más experimentados que ya trabajaron para Lula y diversos otros candidatos del PT. Los tres encabezan un grupo que, en total, reunió a veinte personas” ejemplificó Mario Wainfeld.