Un milagro en el mar
Will Fransen, un pescador de 61 años, vivió una experiencia aterradora cuando cayó de su barco mientras intentaba pescar un marlin, un pez gigante que puede llegar a medir hasta tres metros. Sin chaleco salvavidas, Fransen flotó en el agua durante casi 24 horas, mientras un tiburón se acercaba peligrosamente. Por suerte, su reloj de pulsera reflejó la luz del sol y fue visto por tres pescadores que pasaban en un barco cercano.
La lucha por sobrevivir
Fransen, consciente de sus pocas posibilidades de ser encontrado, utilizó su reloj para atraer la atención del barco que pasaba. “Sabía que mis posibilidades no eran muy buenas; normalmente soy bastante positivo, pero sabía que mis posibilidades no eran buenas”, dijo en una entrevista. Finalmente, un trío de pescadores notó el reflejo inusual en el agua y descubrió a Fransen luchando por llamar su atención.
El rescate
Después de haber estado flotando durante tanto tiempo, Fransen fue rescatado cerca de la Isla Mayor el miércoles. Cuando fue sacado del agua, estaba increíblemente pálido y frío, según uno de los rescatistas. La historia de su supervivencia es increíble y sorprendente para muchos, pero Fransen está ahí para contarlo. Aunque sufrió quemaduras por el viento y rigidez en las articulaciones, está agradecido de estar vivo y planea mejorar las barandillas de seguridad de su barco.
La historia de Will Fransen es un recordatorio de la fortaleza y la determinación humana. Su resistencia y el hecho de haber sido encontrado son verdaderamente milagrosos.