El caso abierto contra Dina Boluarte.
En una situación inédita en Perú, la policía realizó un allanamiento en la vivienda de la presidenta Dina Boluarte y en su despacho en el Palacio de Gobierno. Este hecho se llevó a cabo en el marco de una investigación sobre presunto enriquecimiento ilícito relacionado con varios relojes Rolex que al parecer no fueron declarados. Es la primera vez que un presidente peruano en ejercicio es objeto de allanamientos judiciales y esto podría desencadenar un juicio político por “incapacidad moral”, una figura constitucional que ya ha llevado a la destitución de varios mandatarios en el pasado.
Boluarte denunció este allanamiento como un “ataque y acoso sistemático”, mientras reafirmó que continuará su mandato hasta el 2026. La presidenta afirmó que la medida realizada en la madrugada fue arbitraria, desproporcional y abusiva, y añadió que no es corrupta ni ladrona.
En la madrugada del sábado, un grupo de policías y fiscales ingresó a la casa de Boluarte en Lima, derribando la puerta con una barra de hierro. Posteriormente, los agentes se dirigieron al Palacio de Gobierno donde realizaron un registro en el despacho de la mandataria.
El primer ministro peruano, Gustavo Adrianzén, informó que se allanó el domicilio privado de la presidenta y luego se llevaron a cabo registros en el Palacio de Gobierno con los mismos propósitos. Aunque la Fiscalía no reveló los resultados de los allanamientos, la defensa de Boluarte aseguró que los policías encontraron alrededor de diez relojes en su habitación dentro de la sede del gobierno. Estos relojes no fueron confiscados, pero se tomaron fotografías como constancia.
Expertos en joyería citados por la prensa estiman que el valor de los relojes de lujo encontrados podría alcanzar los 500.000 dólares. Boluarte está siendo investigada por presunto enriquecimiento ilícito y omisión de declaraciones en documentos públicos, después de no acudir a las citaciones para explicar la procedencia de los relojes.
El primer ministro peruano criticó fuertemente los operativos realizados, considerando que fueron desproporcionados, injustificados e ilegales. Aseguró que confían en que durante la investigación se aclarará que Boluarte no tiene ninguna responsabilidad por los delitos que se están investigando.
El escándalo de los relojes Rolex estalló después de un reportaje del programa periodístico “La encerrona”. El medio reveló que Boluarte había utilizado varios relojes de lujo de la marca en actividades oficiales desde que ocupaba el cargo de vicepresidenta en el gobierno del expresidente Pedro Castillo. Boluarte había mencionado previamente que tenía un Rolex “de antaño” que había obtenido con el esfuerzo de su trabajo.
La Contraloría de la República anunció que revisará nuevamente las declaraciones de bienes presentadas por Boluarte en los últimos dos años para buscar algún posible desbalance patrimonial. Además, la Fiscalía ya se encontraba investigando casos relacionados con la presidenta, como el presunto genocidio, homicidio calificado y lesiones graves por la muerte de más de 50 ciudadanos durante las movilizaciones sociales al comienzo de su presidencia.
La popularidad de Boluarte es muy baja, con apenas un 10% de aprobación en las encuestas. La presidenta no cuenta con una bancada propia en el Congreso y asumió la presidencia después de que Castillo fuera destituido por intentar disolver el Parlamento y gobernar por decreto.
