A horas del debate presidencial dialogamos con la dirigente peronista de la Ciudad de Buenos Aires, Nydia Lirola, quien encabezó la lista legislativa del movimiento nacional justicialista en la lista del espacio del conductor Guillermo Moreno.
Le preguntamos sobre si los candidatos tienen conocimientos idóneos y estudios de los temas a debatir y nos contestó: “Bueno, por un lado el tema del estudio es cierto. El candidato Milei es una persona que está aferrada a sus estudios, entonces justamente no es él el que no sabe, digamos, que no tiene argumentos estudiados. Él quizás, si algo peca, es de tener algo muy estudiado que no tiene relación con la realidad. Es un marco teórico de algo que nunca se experimentó en el mundo entero y que las propias personas que propicien, que quieren esto y que te lo hablan como si fuera un ideal, justamente le dicen que es un ideal y está muy lejos de poder relucharse. Pero en cambio Milei parece creer que se puede avanzar en ese sentido. en el mundo tal cual es. Y realmente eso no es el caso y si saliera electo se va a chocar contra la realidad y bueno, nos va a tocar a todos ser parte de ese choque, nos va a tocar tener las consecuencias de ese choque. Con respecto a los otros candidatos, lo que creo es que si no saben y mienten mucho, mienten mucho, porque ninguno de ellos, creo, piensa que con las recetas o las poquitas cosas que dijeron que van a hacer, crean que realmente la Argentina tiene futuro. Nos faltó un candidato que hable, porque el candidato Schiaretti, por ejemplo, habló de alguna cosita que es sensata. Cada uno por ahí puso alguna cuestión sensata en discusión, o la puso sobre la mesa, ¿no es cierto? Que tiene que haber equilibrio, por ejemplo, fiscal. Ahora, no sé cómo el plan de Schiaretti, de darle el banco central a la oposición, cómo haría para desde ahí manejar la economía, ¿no? Porque más allá del Ministerio de Economía, el Banco Central tiene que estar en el proyecto político del gobierno”.
Le preguntamos a Lirola si existen planes económicos liberales y se parecen entre sí los candidatos liberales Massa, Bullrich y Milei: “Algunas cosas, ¿no? En el caso de Bullrich y en el caso de Sergio Massa, que tienen un plan económico parecido, cuando lo enuncian, lo enuncian un poco distinto, pero se les nota lo parecido, y no es un plan económico industrialista como el que necesita la Argentina para incluir a todos sus hijos. Porque el único plan económico que puede incluir a los casi 50 millones de argentinos que somos es un plan económico industrialista, la Argentina industrial. Y ninguno de los candidatos habló de la Argentina industrial, ningún candidato promovió la Argentina industrial, ningún candidato ni siquiera esbozó el objetivo de una Argentina industrial. Por lo menos es que no supieron cómo hacerlo porque tuvieron esbozado. Pero no, ni siquiera es eso. Hablaron, el candidato Massa habló de vender nuestra energía. Cuando lo que nosotros necesitamos no son dólares, es energía barata para que nuestra potencia industrial crezca, digamos, vuelva a ser una potencia media y exportemos productos con valor agregado por el trabajo de nuestro pueblo”.
Sobre esto destacamos el Plan Económico Peronista presentado por su espacio que núcleo a trabajadores organizados en el movimiento obrero, economistas y hasta sectores productivos para lograr el fifty fifty de la doctrina del socialismo nacional de Juan Perón: “El 50% del costo de la producción en alquiler, ese es un tema central. Y después la energía, que en vez de estar en relación con los costos, para que la podamos usar para el beneficio de nuestra patria, para el beneficio de nuestro país. de nuestro pueblo, para que pueda tener trabajo, producir y exportar su trabajo, no, queremos vender la energía. Entonces estamos en un problema serio porque la discusión pasa a ser la discusión de lo menos importante, la discusión en el debate anterior y en el próximo, la discusión de lo que no importa, o de lo que no importa mucho. Cuando podemos tener una discusión profunda de largo plazo, de corto plazo para realizarla, de largo plazo para recoger los frutos de esa decisión.
Una decisión de hacer un plan económico que tiene en cuenta a todos los factores del país, incluyendo a la lidarquía que sería la que la tienen que poner, incluyéndolos, haciendo los socios de una Argentina industrial. Es un plan económico de la mancomunión entre el capital y el trabajo, es el plan económico que le sirve al pueblo argentino en su totalidad, tanto a los empresarios como a los trabajadores, porque en la relación empresario-trabajadores hay una cosa principal que es que existan empresas donde los trabajadores tengan trabajo, las empresas para eso tienen que ser rentables y los trabajos tienen que ser bien remunerados. Esa cuestión, ese objetivo tiene el peronismo, la mancomunión del capital y el trabajo. No hay manera de que toda la Argentina tenga trabajo, es con un montón de empresas rentables que den trabajo bien pago, no existe otra forma. discusiones que tenemos con otros grupos que están sobre biologizados, y también a veces a destiempo, ¿no? Porque hay un momento para discutir al interior de la dicotonía entre el capital y el trabajo. ¿Cuándo es ese momento? Cuando la empresa es rentable y, por ejemplo, los trabajadores ganan poco. Ese es un momento donde en realidad la discusión está hacia el interior de esa dicotomía. En este momento, nosotros estamos hace muchos años en otra discusión, que es la discusión de que la empresa no es rentable y los salarios entonces son bajos porque hay poca rentabilidad, porque la rentabilidad está en el sector financiero y no en el sector de la economía real. Entonces, ahí tenemos otro problema. Cuando los sectores políticos… hacen énfasis en esa diferencia de objetivos que pueden tener el capital y el trabajo, cuando en los momentos en los que en realidad lo que hay que mirar principalmente es qué tienen en común. Y lo voy a poner en un ejemplo muy simple y sencillo, pero para que todos los oyentes lo puedan ver en lo cotidiano. La panadería, la esquina de mi casa, les pague bien a los empleados de la panadería, es muy importante, pero primero tiene que existir la panadería, para que exista la panadería ese negocio tiene que servir, para que el dueño lo pueda tener, no lo pueda hacer a pérdida. Y hoy lo que pasa es que muchísimos negocios van a pérdidas para sostenerse a flote. Y entonces eso, como pasa en toda la economía argentina, hay también bajos salarios. de los salarios deprimidos. Están todas las empresas devaluadas en su valor. Entonces eso es porque la macroeconomía no funciona. Por un lado porque hay déficit fiscal y hay déficit del sector externo y por el otro lado porque la economía productiva, por ejemplo una panadería, transforma la harina y el agua en pan y otras cosas, no también porque el azúcar, etcétera, pero vamos a poner principalmente con el tema del pan y necesita tanto de mano de obra como de comprar alimentos que están carísimos porque se paga un precio muy alto por el alquiler en la zona donde se hace el trigo, el alquiler de la tierra, y encima tienen la energía con la que usan el horno. para hacer el pan todos los días, carísima. Entonces no hay manera de que el pan esté barato. No hay forma, porque todo termina siendo caro. Y la variable más blanda, y esto estoy viendo, la variable más blanda, ya que el trigo es caro, ya que la energía es cara, la variable más blanda es el empleado que tampoco tiene otras opciones de buen trabajo. Entonces es un problema cuando en realidad nos metemos ahí y hacemos un tema de que el problema es cómo se llevan el capital y el trabajo, cuando por ahí hay otras condiciones que no pasan por ese lugar y que son primordiales para que el negocio sea rentable, y ahí sí, ahí sí, con sindicatos fuertes, ahí sí está todo de otro. Siempre está porque obviamente los sindicatos… que están para velar por el bienestar de sus trabajadores, de los trabajadores que nuclean.
Pero es un tema que la política, y en este caso pongo a la izquierda por supuesto siempre, y después a muchos de los que hablan en este gobierno, que en realidad hablan mucho sobre algo que en realidad no termina de solucionar nada, y no hablan sobre lo importante que la tierra donde se hacen los alimentos para los argentinos en la zona núclea de la Pampa Húmeda”.
Situó el fin de la década ganada allá por el 2013 cuando “el gobierno de Cristina, el Ministerio de Economía que ahí empezó a dirigir y que se los dio en ese momento para en adelante nuestra empresa empezó a ser menos rentable. Ahí va. Y entonces cada vez que se iba una persona nosotros no convocábamos a otra persona para ocupar esos lugares. Ahora, las personas que no tienen empresas, no tienen un posición familiar, no manejaron un kiosco, no sé qué. Puede parecerles que nosotros, porque lo he escuchado de nosotros. No lo escuché de nosotros, lo escuché de Roca, pero lo pongo también en una empresa familiar. ¿Aprovechamos para qué? Tener menos empleados. Y la verdad es que es alguien que hizo algo así, que no tiene ni la menor noción de que vos, cómo es que aprovechás la circunstancia para tener menos empleados. En todo caso, si vos me preguntás mi deseo, yo querría tener más empleados, no voy a tener que tener menos. ¿Por qué? Ah, porque les pagás menos. Ya que si la empresa es rentable, que es lo que hizo Fesina, les pagaría más. Entonces, todos los empresarios, ninguno quiere tener menos empleados, quiere tener una empresa más grande y tener, en todo caso, más empleados. Por supuesto que quiere una ecuación determinada que le permita que le vaya bien y seguramente, mientras mejor le vaya, mejor. Pero eso confunde tantas veces cuando se ponen compañeros que incluso son periodistas, pero que por ahí son empleados. O por ahí, sí, tanto del sector privado como público. Pero nunca se lo pusieron a pensar desde el quiosquero. ¿Por qué el quiosquero va a tener menos empleados de los que tiene? Sí, porque les paga menos. Está bien, pero ¿Por qué no va a querer tener más? ¿Por qué no va a querer tener un kiosco más pujante? ¿Por qué no va a querer, al contrario, tener más gente trabajando? La lógica de la empresa es que, justamente, ahí parecen, incluso, parecen venir de por izquierda, pero como se olvidan de la pluralidad, es medio raro, pero la lógica de la empresa es poder ser más grande, tener más movimiento y tener más gente trabajando para hacerla más grande. Después, ahí están los sindicatos, etcétera, etcétera, para trabajar para que los trabajadores ganen bien y se lleven una parte más importante de esos ingresos de los que se hace la empresa gracias al trabajo de los trabajadores. Eso siempre. Ahora, confundir y creer que fundir a las empresas es lo que, bueno, es medio raro”.
Nydia Lirola tiene experiencia en el sector privado quien junto con su familia coordina una empresa familiar que se dedica al rubro de la cultura. Así se refirió a su sector: “A ver, los libros que nosotros vendemos, si la gente tiene plata, la gente los compra. No sé si los leen o no, porque eso es una cosa que me queda lejos, saber qué hacen después con los libros que nos compran. Pero a nosotros, si la gente tiene plata, nos compran los libros. Son libros hermosos, muy atractivos. Bueno, no son libros como los libros de librería, son libros, bueno, los que son para adultos son libros de consulta, hay algunos que son de enfermería, pero específicos, distintas especializaciones de enfermería. Trabajo mucho con los enfermeros, entonces tenemos esos libros. Después tenemos diccionarios, enciclopedias, libros de cocina, un montón. Y a pesar de que existen en Google, etc., a la gente le gusta comprar estos libros de cocina preciosos y con recetas lindas, sencillas, con alimentos argentinos, bien contadas, etc.muchos libros para chicos que son muy atractivos que son libros hermosos que duran toda la vida los quiero vender porque para nada, no te los podría vender tampoco si quisieras porque trabajábamos con un sistema de cliente particular pero quiero decir que son libros hermosos muy atractivos y que todas las abuelas y las madres que son chiquitos nos compran esos libros y lo pongo en femenino porque la mayor compradora de libros en el mundo de todo tipo de libros son las mujeres y sobre todo libros para chicos es pero arrasado el número de mujeres con respecto a los hombres que las compran así que los libros, si la gente tiene plata, se compran son libros caros que se compran en cuotas yo uso figuras así, este tipo de libros se llama venta de libros a crédito ese mercado existe, está y como la gente no tiene que tener plata en el momento, si uno los muestra bien, los libros se venden. Ahora, el pedido adquisitivo está muy reducido y nosotros en nuestra pequeña empresa familiar pasamos de tener bastantes empleados a no ocupar de nuevo el cargo, el puesto de trabajo, cuando alguien se fue de 2013 para acá, cada persona que se fue no se reemplazó su espacio, salvo, bueno, en alguna ocasión en el 17 se fue una chica que se reemplazó y después en el 19 creo también se fue otra chica que también se reemplazó, que esa chica fue la que se reemplazó y que se reemplazó con otra chica que también se reemplazó. desde 2001 para acá. Fuimos nosotros creciendo en la década ganada en cantidad de personas que trabajaban con nosotros y después de 2013-14 para acá fuimos reduciendo a pasos agigantados la cantidad de gente que trabaja. ¿Qué pasa? Eso puede ser una cosa personal, el que lo escuche lo entiende como algo personal, cuando una persona que está en política puede hacerlo, pero lo estoy contestando porque me lo preguntaste, pero también porque para mí es una muestra. No, es que en ese sentido íbamos, que hay un montón de electores que de repente tienen una pequeña empresa y está en la misma situación, por eso es que te lo preguntaba, no para ir al caso particular. Exacto, exacto, exacto. Yo no tengo nada personal que quiera estar exponiendo, sino que es el caso que cuando el modo especulativo-rentístico que arrancó en el 2014 con la devaluación.”