El encuentro entre la vicepresidente Victoria Villarruel y el ministro del Interior Guillermo Francos con el senador Francisco Paoltroni (Formosa) ha sido descrito como un gesto político significativo por parte de los voceros libertarios. Sin embargo, este intento del formoseño por convertirse en presidente provisional del Senado y segundo en la línea sucesoria presidencial fue frustrado por una serie de negociaciones políticas y la interna de La Libertad Avanza.
La reunión tuvo lugar en el despacho de la presidencia del Senado, con Villarruel como anfitriona. Aunque solo se ha filtrado información sobre la discusión en torno al decreto de necesidad y urgencia emitido por el gobierno de Javier Milei y el armado de las comisiones de la Cámara alta.
Este encuentro se produce poco después de que la vicepresidenta apoyara al senador Bartolomé Abdala (San Luis) en una feroz interna dentro de La Libertad Avanza, lo que resultó en su elección como presidente provisional con el respaldo de una mayoría circunstancial de 39 senadores.
Esto generó una dura y pública reacción por parte de Paoltroni, quien anunció en el recinto del Senado que votaría con libertad de conciencia y lanzó una advertencia contundente. “Como decía el Presidente (Milei), no somos manada; y como también decía el Presidente, el que las hace las paga”, remató su intervención en la sesión.
Esta intervención dejó al descubierto el malestar de Paoltroni hacia la vicepresidenta, a quien acusó de haberlo excluido de la postulación bajo presión de José Mayans, jefe del bloque kirchnerista del Frente de Todos y también formoseño. Según esta versión, Villarruel habría utilizado el veto del gobernador Insfrán para imponer ella misma el nombre del presidente provisional y marcarle el terreno a Milei, quien públicamente había designado a Paoltroni para ese cargo.
Francos en Diputados
Además de su visita al Senado, Francos también estuvo en la Cámara de Diputados junto al presidente del cuerpo, Martín Menem (La Rioja), aunque no se han revelado detalles de la reunión.
A pesar de no realizar declaraciones, en un breve encuentro con LA NACION en los pasillos de la Cámara baja, el ministro del Interior ratificó la postura del Gobierno de que “el DNU no se negocia” y que “no está previsto que se convierta en leyes espejo”, tal como había solicitado el senador Martín Lousteau (UCR). Además, aseguró que los proyectos prometidos por el Gobierno ingresarán al Congreso la próxima semana.