El Senado debatirá un polémico decreto de necesidad y urgencia sobre la desregulación de la economía
El Senado de la Nación celebrará una sesión este jueves para tratar el decreto de necesidad y urgencia 70/23, el cual busca realizar una desregulación de la economía en el país. Esta medida ha generado una fuerte tensión entre la Casa Rosada y Victoria Villarruel, ya que la vicepresidenta ha decidido aceptar el debate del polémico DNU a pesar de saber que la oposición cuenta con los votos suficientes para rechazarlo.
Victoria Villarruel realizó un último intento para evitar el debate del decreto, pero no tuvo éxito. Durante la reunión de Labor Parlamentaria con los jefes de bloque del Senado, propuso prolongar por una semana el tratamiento del DNU debido a las negociaciones en curso entre el Poder Ejecutivo y los gobernadores para alcanzar un acuerdo fiscal. Sin embargo, su propuesta no fue aceptada.
A pocas horas de la sesión, el clima se volvió tenso debido a un feroz ataque de cuentas libertarias en redes sociales contra Villarruel. Además, el Poder Ejecutivo ha ejercido presión para evitar que se discuta el DNU, sobre todo después de que lograra dejar sin quórum el intento de la oposición por impulsar la aprobación de un proyecto sobre la movilidad jubilatoria en la Cámara de Diputados.
En un comunicado de la Oficina del Presidente, la Casa Rosada dejó claro su postura en relación al DNU y a la iniciativa de promover una nueva fórmula jubilatoria sin consenso. El comunicado advierte que estas acciones van en contra del espíritu de acuerdo promovido por el Presidente en su convocatoria al Pacto de Mayo y podrían causar un grave retroceso en los derechos y necesidades del pueblo argentino.
El Gobierno Nacional espera que el Poder Legislativo no se deje influenciar por aquellos que buscan obtener victorias a corto plazo en detrimento del futuro de los 45 millones de argentinos, según se expresa en el comunicado.
En las últimas 48 horas, Villarruel ha estado argumentando a favor de la continuidad del decreto, sosteniendo que de su tratamiento depende la estabilidad institucional. Sin embargo, sus esfuerzos no han tenido éxito y, por lo tanto, la vicepresidenta ha convocado a sesión para tratar el DNU.
La postura de los bloques de la oposición dialoguista ha generado nerviosismo y discusiones en su interior. Algunos miembros de la UCR se han mostrado a favor de rechazar el DNU, mientras que otros prefieren postergar el debate. El jefe de la bancada radical, Eduardo Vischi, llegó a la reunión de Labor Parlamentaria con la instrucción de aceptar la postergación si así lo pedía el oficialismo, sin embargo, no se llegó a un consenso.
El kirchnerismo, el senador correntino Carlos Espínola y la senadora neuquina Lucila Crexell se han mantenido firmes en su postura de no dilatar más la cuestión y han pedido tratar el DNU tal como estaba previsto en la convocatoria de Villarruel.
Todo indica que el DNU será rechazado, ya que a los 33 senadores de Unión por la Patria se sumarían, como mínimo, los votos de Espínola, su compañero de bancada Edgardo Kueider, Crexell y los senadores santacruceños José María Carambia y Natalia Gadano. Esto sumaría un total de 38 votos, uno más que la mitad más uno del cuerpo.
No obstante, la sesión se celebrará en medio de un clima de total incertidumbre. Algunos especulan con que al momento de la votación, la sesión podría quedarse sin quórum debido al temor de la oposición dialoguista a quedar asociada con el kirchnerismo. Otra posibilidad sería una intervención del Poder Ejecutivo, aunque no se confía en que esto suceda.
El Senado se prepara para debatir un polémico decreto de necesidad y urgencia relacionado con la desregulación de la economía. La vicepresidenta, Victoria Villarruel, ha sido cuestionada por aceptar el debate a sabiendas de que la oposición cuenta con los votos necesarios para rechazarlo. El clima político se encuentra tenso y la votación se llevará a cabo en medio de incertidumbre.