El actual Diputado de la Nación Martin Tetaz de Evolución Radical analiza la situación de la UCR y la posición de Juntos por el Cambio frente a un ballotage que causa revuelos. Entrevista exclusiva de Tamara Seput
– Teniendo en cuenta los diferentes comunicados de los espacios políticos, ¿cuál sería la postura de la UCR partido en el presente y pensando en el futuro?.
– La postura del partido es que no estamos a favor ni del populismo de derecha, ni del populismo de izquierda, que estamos en contra históricamente de todo lo que representan los valores del kirchnerismo y que están hoy en cabeza de Massa, estamos en contra de la corrupción, estamos en contra de la manipulación de los electores, de una economía que no es competitiva, por supuesto, de todo lo que significa Massa. Pero también estamos en contra del totalitarismo que representa Milei, de su intolerancia hacia los otros espacios políticos, de su intento de mercantilización de la educación y de la salud, de sus posiciones extremas que no funcionan en ninguna parte, respecto a la economía, como por ejemplo la dolarización. Por eso nuestra posición es clara y neutra en este sentido, no vamos a apoyar a ninguno de los dos candidatos.
– Frente a esta postura tomada por tu partido, ¿qué pensás de los radicales que se van con Milei? ¿Y de los que se van con Massa?.
– Cuando un espacio político toma una decisión, esa decisión refleja los valores y la línea de ese espacio político. Luego, a título personal, cada persona es libre de tomar la decisión que le crea conveniente. El radicalismo no obliga a sus dirigentes a adscribir a la misma oposición. Si alguien del PRO está de acuerdo con Milei o está de acuerdo con Massa, o algún radical está de acuerdo con Milei está de acuerdo con Massa, está en todo su derecho. No puede hacerlo en nombre de su partido, obviamente, lo tiene que hacer a título personal.
– Viendo las últimas declaraciones de público conocimiento, ¿cómo tomas la decisión de Mauricio Macri, Patricia Burrich y Luis Petri, habiendo sido parte de una coalición de gobierno?.
– Yo lamento la decisión de que todos, de distintos espacios políticos, se están expresando por uno o por otro candidato, pero bueno, porque no coincide con la posición que quiero yo. Pero la respeto, cada uno tiene el derecho a hacer la expresión que quiera y a plantear la expresión que quiera mientras lo haga a título personal, me parece bien. Lamentablemente, en el caso sobre todo de Patricia, es la figura, la representante del espacio de Junto por el Cambio que acaba de llevar Junto por el Cambio a la presidencia, y por lo tanto su decisión y su apoyo se lee como un apoyo de Junto por el Cambio y no como un apoyo a título personal, por más que ella lo aclaró, que el apoyo es a título personal, pero obviamente es difícil ahí trazar una línea.
– En el caso que ganara Milei el ballotage, ¿crees que está en riesgo la democracia?.
– No, yo no pienso que esté en juego la democracia, pienso que ninguno que gane va a tener mayoría en el Congreso y por lo tanto va a haber un Congreso que va a ser un contrabalance y va a frenar de alguna manera las posiciones más absolutistas y que por lo tanto no creo que esté en riesgo, es extremo de que esté en riesgo la democracia. Hace 40 años que está consolidada la democracia en Argentina y ha tolerado crisis tremendas, gobiernos corruptos, no creo que esté en riesgo por eso, habrá resortes institucionales que acomodarán las cosas, pero no creo que la democracia peligre.
– Si tuvieras que hacer una autocrítica del Radicalismo y de JXC, ¿cuáles serían?.
– La principal autocrítica es que nosotros no fuimos capaces de construir una propuesta alternativa al Kirchnerismo y a lo que está pasando en la Argentina. No fuimos capaces de seducir al electorado con una propuesta atractiva y perdimos mucha identidad en una interna que no leímos lo que le estaba pasando a la sociedad. La sociedad demandaba otro compromiso de Juntos por el Cambio, otra señal de unidad, otra preocupación por los problemas de los Argentinos y nosotros perdimos prácticamente un año discutiendo quién iba a ser nuestro candidato a presidente, para cuando lo terminamos de definir, de una forma razonable, que es la de la paz o que es la arquitectura institucional que nosotros tenemos y que nos parece bien y que eso está perfecto, no logramos unir al espacio tampoco. Y tardamos mucho en mostrarle a la gente realmente el espacio integrado. La decisión de finalmente sumar a Horacio… sobre el final de la campaña, no, no, todo esto no estuvo bueno. La ciudad tampoco se vio integración de los distintos espacios políticos, que integran junto por el cambio. Y eso obviamente afectó la competitividad del espacio.
– En tu caso en particular, ¿votarías en blanco o nulo?, ¿qué le recomendarías a la sociedad?. Ya que está cansada de peleas entre políticos y dirigentes, donde no encuentran soluciones. Políticas, económicas, sociales ni culturales.
– No, yo a título personal voy a votar en blanco, porque me preocupan cualquiera de las dos alternativas. Me preocupa mucho la economía en el esquema kirchnerista, pero también me preocupa mucho algunas posiciones de Milei, en temas de salud, de educación, de política exterior, y también sus inconsistencias en materia económica respecto a las reformas que quiere hacer. Entonces la verdad que estoy muy preocupado en los dos casos y por eso voy a votar en blanco y a tratar de construir desde el Parlamento una opción alternativa a lo que nosotros fracasamos en construir ahora, tenemos el desafío de construirlo hacia adelante. Ofrecerle a la sociedad una alternativa de oposición que ponga frenos en el Congreso y que al mismo tiempo empiece a construir una propuesta para la Argentina.
¿Crees que se pueden llegar a acuerdos en ambas cámaras sobre reformas que se necesitan hacer?. Ya que se requieren de acuerdos básicos que están por encima de las ideologías partidarias.
– Ojalá, gane quien gane, muestre una voluntad de diálogo en el Congreso y muestre una voluntad de construir reformas por encima de las cuestiones ideológicas de cada uno, que es lo que la Argentina ciertamente necesita. Por ejemplo, ojalá, gane quien gane, proponga una reforma del Banco Central que le de absoluta independencia, porque eso lo apoya a la izquierda y a la derecha en Chile, lo apoya a la izquierda y a la derecha en Brasil, lo apoya a la izquierda y a la derecha en Colombia, lo apoya a la izquierda y a la derecha en Uruguay. Entonces podríamos tranquilamente apoyarlo todos acá. Sería un golazo que Argentina tuviera realmente independencia del Banco Central y se terminaría con la inflación. Ojalá pudiéramos avanzar en algunas políticas públicas de ese estilo.
– Y por último después de pasar 4 años de un gobierno muy complejo, donde la gente no cree en ningún político, y perdió las esperanzas de un país mejor, ¿qué mensaje le darías a la ciudadanía?
– El mensaje que le daría a la ciudadanía es que la evolución de la política es lenta y es una carrera larga, es una maratón. Cuando vos la ves de afuera, como la vi yo durante toda mi vida, te da impotencia, te da bronca, queres cambiar un montón de cosas, pero después cuando entras, cuesta porque la construcción de consenso para cambiar las cosas es un trabajo arduo.
En democracia las cosas cuestan bastante, los cambios después son más duraderos, pero cuesta construir los consensos, e ir ganando la opinión pública en torno a esos consensos, y entonces la tarea es una tarea que da resultados, pero a más largo plazo. La sociedad tal vez no tiene esa paciencia hoy, pero hay que renovar la confianza en la democracia, en que es el único camino posible y que desde la política es la única forma de transformar la Argentina. Y eso lo vamos a hacer a medida que seamos capaces de construir esta alternativa.